La mayoría de los Adolescentes pasan horas y horas frente a la pantalla del móvil. Este tiempo se dedica a ver los «me gusta» recibidos en una foto, los comentarios, las fotos de otras personas, los amigos, incluso los amigos de amigos de amigos de amigos que no conocen y que se comparten en una red social o en varias.
Facebook, Instagram, Twitter y otras grandes redes sociales han cambiado nuestra vida. Eso a día de hoy nadie puede ponerlo en duda. Han cambiado la forma en la que interaccionamos con los demás, la forma en la que hacemos amigos, como nos relacionamos, nuestro comportamiento, nuestras aficiones y tendencias y en definitiva tienen impacto en todos los dominios de nuestra vida.
¿Cómo influye este panorama persuasivo e invasivo en nuestros jóvenes y adolescentes? Influye mucho, tanto que en muchos hogares se están viviendo verdaderos dramas por la influencia extrema de RRSS.
Si tienes hijos o allegados adolescentes es importante que reflexiones sobre las siguientes aspectos, porque conocerlos te ayudará a identificar situaciones de riesgo en casa.
Influencia de RRSS en Adolescentes y Jóvenes
Autoestima dependiente del número de contactos o «Likes/me gusta»
La necesidad de aprobación y de sentirse aceptado es una necesidad que en la adolescencia es una prioridad para el adolescente. La unión de esta etapa junto con las redes sociales ha provocado que la cantidad de «me gusta» que recibe el adolescente determine, en gran parte, su autoestima.
Necesitan sentirse aprobados por su grupo de amigos y creen que la forma es recibiendo muchos likes en Redes Sociales. La autoestima de la mayoría de los jóvenes se encuentra totalmente alterada debido a las Redes Sociales. En el caso de no ser «tan populares» como creen que es lo recomendable sufren una disminución de su estima y experimentan sentimientos, emociones y pensamientos muy negativos hacia sí mismos.
Es frecuente que los jóvenes se comparen con el resto de sus amigos u otras personas en función de la cantidad de «me gusta» que reciben, el número de seguidores u otros aspectos relacionados con las redes sociales. En la mayoría de los casos los adolescentes olvidan que realmente las redes sociales solo muestran lo superficial de la vida de las personas, algo irreal en la mayoría de los casos, que en muy pocos casos retrata de forma objetiva la realidad de las vidas humanas.
Las Redes Sociales están provocando que las conversaciones «cara a cara» y las interacciones reales se menosprecien.
Los jóvenes prefieren, en muchas ocasiones, mantener un contacto virtual y superficial con miles de amigos por Instagram u otras redes sociales, que hacerlo en la vida real y diaria.
No obstante, en realidad, lo que nos aporta una conversación con nuestros amigos, un paseo hablando sobre nuestros pensamientos y sentimientos, es mucho más importante e imprescindible que aquello que nos aporta las Redes Sociales.
Nos sentimos queridos e importantes para esas personas, lo cual en las amistades de Instagram o Facebook es inexistente.
Por esta razón, muchos adolescentes se sienten muy solos y vacios a pesar de contar con cientos de amigos en Facebook.
Ocultar o camuflar inseguridades o complejos detrás de la identidad digital
Las relaciones sociales son una de las principales motivaciones en la adolescencia y juventud, junto con el inicio de las primeras relaciones. Una de las situaciones más alarmantes que nos estamos encontrando en la clínica diaria es un incremento de jóvenes y adolescentes que una vez llegan a consulta reconocen tener complejos y considerarse físicamente «feos» «gordos», «torpes socialmente» y que estos sentimientos y creencias de inferioridad les precipitaron o llevaron a iniciar relaciones virtuales con personas que no conocían.
En esos momentos reconocen que esas «falsas relaciones» les aportaban la seguridad en ellos pero de forma progresiva lo que había detrás de esos falsos amores solo era una intención de pedir fotos eróticas o pornográficas a cambio de falsas palabras.
En este artículo del País podrás leer las conclusiones de un artículo británico donde se relaciona a Instagram como la peor red social para la Salud Mental de los Adolescentes. El artículo pone de relieve y relaciona el consumo de RRSS por encima de dos horas diarias como un factor de riesgo para experimentar ansiedad, depresión y angustia.
¿Cómo puedo detectar que las RRSS están teniendo un impacto negativo en la vida de mis hijos adolescentes?
Si has notado cambios de humor o estado de ánimo en tus hijos y ese cambio no es transitorio, sino que lo llevas observando con cierta regularidad, presta atención a las siguientes situaciones:
- Ha aumentado de forma progresiva el número de horas diarias.
- Nunca se separa del teléfono móvil y si se lo recuerdas o le animas a dejar de usarlo, se irrita de forma desproporcionada.
- Le has notado ansioso, intranquilo e irritable a pesar de que se conecte y mantenga contacto por RRSS.
- Ha dejado actividades y ha reducido las actividades sociales cara a cara.
- Por la noche se niega dejar el móvil fuera de la habitación.
- Se muestra disconforme o desanimado por su imagen física.
¿Estás viviendo esta situación en casa? ¿Habéis vivido alguna situación dolorosa por el uso inadecuado de las RRSS? ¿Crees que debemos de incluir alguna situaciòn más? Coméntanos que podamos seguir mejorando el artículo.